lunes, 21 de septiembre de 2015

EL PERIODISMO HOY


Cuando los emigrantes y los refugiados huyen de la miseria y la guerra en busca de un lugar donde sobrevivir y se fabrican fronteras de cuchillas afiladas y sus vidas acaban ahogadas en el mar, no hay  neutralidad que valga. El periodismo tiene que estar en el lado de la valla de los desfavorecidos, despertando la conciencia ciudadana  para acabar con la mezquindad de los políticos que consienten esas injusticias.
  El periodismo tiene que utilizarse como herramienta para transformar la sociedad, para agitar las conciencias de los ciudadanos, para protegerles de los desmanes de los poderosos, para defender los derechos de los más  débiles e incluso para movilizar a los que miran a otro lado ante las injusticias.
El periodismo no debería ser aséptico ni neutral. Tiene que contaminarse con las aspiraciones y miserias de los hombres y tomar partido por sus causas. Tendría que abrirnos los ojos y los oídos a todos para así acabar con la ceguera y sordera interesada de tantos que se instalan en la comodidad.
El periodismo de hoy ya no debe resultar incómodo solo para los gobiernos y los poderosos, ahora también debe conmover, movilizar  e inquietar a los ciudadanos.
Se dice que sin periodismo libre no hay democracia, pero a lo mejor se ha quedado en una frase hecha. Hoy no basta con ese formalismo. Democracias hay muchas, todos los países europeos lo son, quizá no del todo reales porque no cabe que en nombre de ellas se permita que se cometan  abusos con la humanidad, pero a lo peor es que no  se ejerce tampoco en todo el mundo civilizado un  periodismo real y comprometido.
Se les exige mucho a los periodistas. Han de contar los hechos sin juzgarlos ni condenarlos. Pueden denunciarlos, pero no sentenciarlos. Tienen que aportar los diferentes puntos de vista de una historia y acudir a las máximas fuentes para contrastarla. Tienen que ser honestos y veraces, rigurosos, imparciales y hasta buenas personas, como decía Kapuscinski. En fin, tienen que ser superhombres y supermujeres si tienen que ejercer ese periodismo libre y  comprometido que demanda buena parte de la sociedad.
Tienen que ser tan héroes como los que cruzan las fronteras a través del mar y de las vallas de cuchillas afiladas huyendo de la guerra y en busca de la libertad.

lunes, 14 de septiembre de 2015

PALABRAS SABIAS A OIDOS SORDOS




 Antonio Contreras en su libro “Palabras sabias a oídos sordos” (Rocaeditorial),  ha puesto  la atención de sus silentes oídos a las voces de algunos de los periodistas más importantes de nuestro país.
 Los periodistas son posiblemente los personajes más difíciles de entrevistar.  No es fácil que acepten someterse a los métodos implacables que utilizan con terceros para conseguir sacarles la verdad o las verdades.
Suelen, los periodistas, sentirse incómodos en el diván de las respuestas. Suelen también alegar que  ellos no deben ser protagonistas de la realidad, basta con que la cuenten.
Sostienen, pues,  que no debería ser objeto noticiable  su vida y sus historias, pero quizá si hablamos de Ana Pastor, Jordi Évole, Antonio García Farreras, El gran Wyoming  e Iñaki Gabilondo, encontremos más que razonable conocer qué les mueve a intentar transformar la sociedad a través de la práctica de un periodismo comprometido.
 La habilidad del joven  Contreras (tiene 21 años) para entrar en las íntimas convicciones de estos grandes comunicadores ha consistido en entrevistarlos a fondo con una buena carga de humor y hasta de ironía.
   A algunos los conoce de “andar por casa”, pues Antonio es hijo del directivo de la Sexta, José Miguel Contreras, pero eso lejos de facilitarle hurgar en el interior de los entrevistados le ha valido alguna regañina cariñosa, por ejemplo  de Ana Pastor, que se nota que le quiere. En seguida Antonio, busca zafarse de los mimos paternalistas para ir a su objetivo: conocer mejor a quien está ejerciendo de contrapoder en nombre de los ciudadanos.
De contrapoder, de la incapacidad de autocrítica de los medios y de la falta de independencia versa el brillante prólogo de Fran Llorente, que explica como el periodismo se ha alejado de los ciudadanos para residir en los palacios. Habla  de recuperar la fórmula  de vivir en la calle y con la calle como manera de reconquistar la confianza de la gente en los periodistas.
No descubriré anécdotas de los entrevistados ni confesiones que configuran la personalidad de cada uno de ellos. Antonio Contreras ha querido contrastar lo que le han contado con familiares y amigos de los periodistas. Todos los “cotilleos” están justificados para el guión de este  libro: Acercarnos a cinco grandes comunicadores, conocer sus intereses y debilidades, sus derrotas periodísticas y sus aspiraciones.
Baste solo una fórmula magistral de Iñaki Gabilondo cuando habla de encontrar “balizas de referencia” ante tanta  información como nos llega: “La única manera es la solvencia porque la solvencia es la credibilidad y ésta última se compone de la decencia más el tiempo”.
Supe del libro de Antonio Contreras cuando era solo un proyecto en la cabeza de su autor y de su editora Teresa Peyrí, que le animó a concebirlo. Una tarde de otoño tomando un café con Teresa y Blanca Rosa Roca  me invitaron a  que le buscáramos un título. Antonio es sordo “las veinticuatro horas del día”, “tengo escoliosis y problemas motores leves”, dice.  Miles de sueños y delirios llenan las carpetas de su escritorio mientras que las de los proyectos realizados están repletas de telarañas, según cuenta. Con este libro no solo ha  conseguido acabar con las telarañas de esas carpetas, sino que las ha llenado de palabras sabias. Gracias, Antonio, por compartirlas.

 

miércoles, 2 de septiembre de 2015

DIARIOS BRITÁNICOS CONTRA LA CRISIS

 La noticia de que 18 diarios británicos se han unido para lanzar una campaña para animar a invertir a los anunciantes en sus periódicos se produce tras una caída generalizada de sus ingresos, especialmente grave, durante este verano.
Los grupos editores: Guardian News &Media, Independent Print, Evening Standard; Mail Newspapers, Trinity Mirror, News UK y Telegraph Media Group , tradicionalmente competidores y enemigos entre sí, colaborarán con más de 4 millones de euros para convencer a los anunciantes de que "Nada funciona como las Noticias" ese es el eslogan que la agencia HHM ha desarrollado para los diarios que publicarán páginas de publicidad y vídeos al respecto.
 Es curioso que la agencia británica de publicidad que ha preparado esta campaña esté constituida por una "start up" constituida hace escasamente dos años por tres viejos y sabios publicitarios retirados de sus puestos en agencias importantes, cuyo primer trabajo fue una campaña sobre el cáncer de prostata. Entre los tres publicitarios: Holmes, Hobbs y Marcantonio (HHM) suman 184 años de edad y más de 100 de experiencia publicitaria. Seguramente son los que mejor pueden entender los problemas de  los medios de comunicación tradicionales.
 El caso de los diarios británicos, es bien diferente al de los españoles. Están sufriendo la crisis publicitaria y la de difusión como la están sufriendo los periódicos españoles, sin embargo han encontrado una vía de crecimiento que aún deben monetizar convenientemente: la de la expansión internacional.
The Guardian, por ejemplo, con apenas 300.000 ejemplares de difusión es capaz de llegar a más de 36 millones de usuarios gracias a sus ediciones electrónicas internacionales en inglés, o The Times de Londres con 670.000 de circulación tiene más de 21 millones de usuarios mensuales.
Nadie se escapa a la crisis del papel impreso, pero pocos tienen una salida hacia el mercado exterior con unas marcas y un idioma que les permite la "exportación" de un modelo donde la forma de elaborar los contenidos es lo relevante.
En nuestro país las ediciones  electrónicas de El Mundo América y las de El País América y   El País Brasil son las que más se pueden aproximar a este modelo aunque, de momento, no tienen el nivel de audiencia fuera de nuestras fronteras que el de los británicos y la rentabilidad está pendiente de llegar.
De todas formas es mejor seguir buscando los ingresos con el crecimiento de la audiencia electrónica y en mercados universales que esperar a que los anunciantes vuelvan a imprimir sus eslóganes en las páginas de papel de los diarios. Estaremos atentos al resultado de esta campaña de los viejos sabios publicitarios.