viernes, 21 de abril de 2017

MAURICIO CASALS, PRESIDENTE DE LA RAZÓN, SÉ FUERTE


  Sé fuerte Mauricio. Tienes el respaldo de muchos políticos y empresarios de distintos signos: sobre todo de aquellos para los que has “intermediado” y tienen mucho que callar. Te lo han recompensado bien porque tú a cambio les has conseguido cientos de favores. Si ellos ganan por qué no van a compartir las ganacias contigo. Esa ha sido tu máxima de  siempre. Recientemente, no fue el último favor, negociaste con Bárcenas su indemnización en diferido para acallarlo frente al escándalo de la financiacion irregular del PP. Ya tenías experiencia cuando lo hiciste con Villalonga expresidente de Telefónica, amigo de Aznar y en tantas y tantas ocasiones. 
  No es  asunto tuyo qué tipo de ganancias tienen esos clientes . Tú no entras en eso, al fin y al cabo  solo presides un periódico y eres consejero de una televisión. Los medios no tienen, según tu criterio, que estar por esas bagatelas. No tienen ningún compromiso moral con la sociedad.
  Por eso quizás te has preguntado en voz alta en el pasillo de la audiencia nacional, dónde te han llevado a declarar como imputado por coacciones a Cristina Cifuentes junto a tu director Marhuenda,: “¿Quién se puede imaginar que desde un periódico se puede amenazar a alguien?”
   Nadie se lo va a imaginar Mauricio, estoy contigo, por eso has de ser fuerte y mantenerte firme en tu postura. A ver si va a resultar que un fiscal o un juez le va dar crédito a esas absurdas acusaciones. Tú sabes que un periódico, a veces, puede hacer mejor servicio a los que lo pagan por las informaciones que calla o desvirtúa, y no me refiero a sus lectores. 
   Nadie se tendría que creer o descreer a La Razón, que tú presides, por el simple hecho de que tu consejero delegado y protegido Edmundo Rodríguez Sobrino, implicado en los papeles de Panamá  y detenido en la operación Lezo,  esté acusado de un supuesto enriquecimiento personal junto con Ignacio González en  las operaciones sospechosas del canal de Isabel II y sus filiales.
  Incluso, aunque parece que La Razón se ha beneficiado de suculentos ingresos del Canal de Isabel II gracias a tener a un “consejero giratorio” en su periódico como Rodríguez Sobrino y a un columnista mal pagado como el ex presidente Ignacio González, ¿qué relación puede tener eso contigo para que  en nombre de tu periódico amenaces a Cifuentes de que se va  enterar si presenta la denuncia contra tus amigos? Nadie se lo puede creer, Mauricio.  Nadie se cree que La Razón pueda amenazar por nada ni publicar algo que no sea veraz. Sé fuerte.
   Te llamaban el Príncipe de las Tinieblas, ¿verdad Mauricio?, ahora ya he recordado quién te puso ese apodo: fue “tu cliente” José Manuel Lara (Presidente de Planeta),
 ”Lara es mi cliente y Creuheras (actual presidente) es mi amigo”, decías para diferenciar tu relación con ellos. Pues, ¿sabes?, le habéis hecho entre todos un flaco favor a tu amigo José Creuheras. Sí,  entre Marhuenda, Rodríguez Sobrino y tú, el presidente de Planeta tiene  hoy la mancheta  de su diario La Razón plena de imputados, sin incluir a  González, el columnista mal pagado.
  ¡Venga que no es para tanto! Quién va a apostatar de La Razón solo porque la cúpula directiva del diario esté bajo sospecha judicial  por amenazar a Cifuentes y a su jefa de gabinete, refiriéndose a ellas como “zorras y putas” a las que les vais a dar de leches para que no presentaran denuncia por las irregularidades del Canal de Isabel II.  Ese no es el lenguaje que emplea tu periódico, todo el mundo lo sabe. Tranquilo Mauricio, tranquilo. Sé fuerte. Tienes  la razón: “¿Alguien se cree que desde un periódico se puede amenazar a alguien?”

 
  
   
 

sábado, 8 de abril de 2017

GRUPOS PERIODISTICOS ECHAN ORO POR LA BORDA

Algunos grupos de Prensa diaria están tirando por la borda sus mejores activos. No me refiero solo al desmantelamiento del talento periodístico de las redacciones y a la falta de inversión en los contenidos, sino a la venta de algunas empresas rentables  que forman parte de su órbita empresarial.
El útimo ejemplo es el de Grupo Zeta que ha vendido su editorial de libros, Edicones B, al grupo alemán Bertelsmann, según algunas fuentes fiables, por alrededor de treinta millones de euros.
Anteriormente ya lo había hecho PRISA con sus sellos literarios al mismo comprador alemán por 72 millones.
Los grupos periodísticos que están fuertemente endeudados no pueden soportar la presión financiera de las entidades bancarias que les exigen amortizar los créditos. Los ingresos de los diarios disminuyen cada año y sus cuentas de resultados son insuficientes para devolver la deuda.
Vender las empresas rentables no deja de ser una patada hacia adelante que no llega a ninguna meta. El resultado económico se verá aún más mermado a futuro al no disponer  de la rentabilidad que generaban los libros en este caso y con  esa visión cortoplacista, que exigen los bancos, no habrá posibilidad alguna de intentar remontar la caída de los periodicos. No resultará fácil tampoco pagar el siguiente plazo de la deuda contraída.
El año ha empezado mal de nuevo para los diarios impresos. La publicidad se sigue alejando de ellos casi al mismo paso que los lectores. Los cuatro grandes diarios nacionales ven descender  en su conjunto un 15% las ventas de ejemplares y un 18%  las de publicidad, según datos  acumulados a febrero. ABC se lleva la palma con un 21% de descenso en ambos capítulos.
La receta para esa gran crisis sigue siendo la de rebajar la paginación que se entrega a los lectores, por tanto los contenidos. Con esa fórmula dentro de poco las redacciones, ya diezmadas, resultarán excesivas y se volverá a los despidos. Se trata de ir tirando lastre por la borda, aunque vaya consigo el oro del que aún disponían.
Hoy el Periódico de Catalunya y el Grupo Zeta al que pertenece  son mucho más débiles y la banca acreedora algo más sólida en su posición. Este de la prensa es cada vez más un mundo de financieros y menos de periodismo.