lunes, 10 de mayo de 2010

asesores, sabios, comités y consejos...

Asisto a un simposium que organiza la cámara de comercio barcelonesa sobre la nueva ley audiovisual que acaba de entrar en vigor. Roures de Mediapro, Carlos Abad de Vertice 360º, Enric Marin , recién nombrado presidente de la radio y televisión catalanas y Ramón Colom ex director de TVE y actual presidente de PROA(las empresas audiovisuales catalanas),diseccionan en mesa redonda la posibles repercusiones de la ley en sus negocios. En seguida queda claro, Roures y Colom hablan del impacto en sus empresas con un lenguaje entendible y pegado a la realidad, Marín se sube a las ramas del bien social y de la necesidad per se de una televisión pública y competitiva que nos cuesta cerca de 400 millones al año a los catalanes.
Hay dos lenguajes por mucho que Roures se empeñe en sostener amablemente que la TV pública tiene su hueco en la nueva televisión fragmentada y digitalizada. Nadie critica el despilfarro de los entes públicos. Sólo Ramón Colom lanza al aire los 1200 millones que salen del estado para financiar TVE.
Los, llamémosles privados, se juegan sus beneficios y arriesgan con sus inversiones con los parámetros que les da la nueva ley que, por cierto, todos consideran que nace obsoleta y que habrá que volver a legislar sobre ella. Vaya, sólo llevamos 30 leyes sobre las teles en 20 años , no está nada mal.
Pero otro día opinaremos sobre la ley.
Lo que más me llamó la atención fueron las tres primeras filas "reservadas" de el salón de La Llotja dónde se celebraba el acto. En esas filas estaban, no todos, los miembros del Consejo Audiovisual de Cataluña y los miembros del Consejo de administración de la Corporación Catalana de Medios de Comunicación, tampoco todos .
Calculé que entre estamentos controladores y administradores pagados con dineros públicos habría unas 20 personas, quizás 25. Ciertamente controlar y ejecutar las televisiones publicas y privadas de una comunidad autónoma lleva su trabajo pensé. Claro que todos ellos , los "reservados de las primeras filas, tiene sus despachos, teléfonos y gente que les auxilía en su cometer porque si no sería imposible evacuar tantos dictámenes, recomendaciones y aesorías como deben hacer.
Roures y Colom venían sólos. Claro, ellos sólo producen. Sólo se dedican a darle valor añadido a sus medios y productoras, por eso no llevaban corbata a diferencia de los "reservados".
Salgo del encuentro y el fin de semana me encuentro con los análisis dominicales de los diarios. La economía financiera se había estado hundiendo en el mundo durante los días precedentes y había que tomar medidas y recapitular.
El comité de sabios de la UE presidido por Felipe Gonzalez hacía entrega del informe que ratifica que vamos mal y que hay que tomar medidas ya. Europa estaba tocada. Las elecciones inglesas no conformarían un gobierno estable a cortísimo plazo, La cancillera alemana se jugaba la mayoría en la cámara alta, Zapatero rectificaba su plan contra el déficit y lo aceleraba, Grecia se encaminaba hacia la quiebra y , según algunos analistas, podía contagiar la economía américana. Sabios y más sabios exponían sus recetas en la prensa nacional: El euro no tiene sentido a medio plazo decía Krugman: "No tiene sentido una moneda única sin gobierno único"... otros analistas reflejaban el buen comportamiento del consumo en España. lo buenos datos de creciminto americano,etc.etc.
Los comités de análisis, los de control y los informes de expertos que inundan en los últimos tiempos las instituciones mundiales, gubernamentales , locales y sectoriales no paran de emitir avisos, recomendaciones, criterios y recetas. Cuando esto sucede en tan amplia magnitud es que los que tienen que decidir y ejecutar las decisiones están perdidos o desorientados.
Menos mal que hay gente sin corbata que se sienta en una mesa para crear y producir. Seguramente por eso las empresas empiezan a mejorar sus resultados y los gobiernos ,por el contrario, son castigados por los electores. Vivimos dos realidades: Las de los que empujan sus iniciativas para obtener buenos resultados y las de los que no saben para dónde han de tirar, a pesar de que cuentan con innumerables asesores, sabios comités y consejos.
Demasiados asientos reservados.

No hay comentarios: